Lo bueno… Lo malo…
Muy bueno es que las autoridades, municipales, estatales y federales estén luchando a brazo partido para ponerle freno al chiwogusano, que junto con su variante Omicron, está poniendo en jaque no solo a México, sino a muchos otros pueblos del mundo.
Lo malo es que las y los ciudadanos no estemos observando estrictamente las medidas sanitarias para evitar los contagios de esa terrible pandemia que ha puesto en jaque al mundo entero.
La Secretaría de Salud informa, al corte del pasado día 19, desde el inicio de la pandemia en el mundo, 332 millones 617 mil 707 casos confirmados del temible chiwogusano que se ha llevado para el otro barrio nada menos que a 5 millones 551 mil 314 personas que todavía estarían entre nosotros, pero apareció ese bicho…
Y para las mismas fechas, en México se han confirmado 4 millones 495 mil 310 contagios que se llevaron a 302 mil 112 hombres y mujeres. El 65 por ciento de los casos registrados, contagios y decesos, se concentra en Ciudad de México, Estado de México, Nuevo León, Guanajuato, Jalisco, Tabasco, Sonora, Puebla, San Luis Potosí y Veracruz.
Yucatán está en el sitio 18, con 88 mil 41 casos positivos y 5 mil 909 defunciones. En el caso de contagios activos sí aparecemos. Los casos activos son los positivos que presentaron síntomas 14 días atrás. Esto abarcaría desde el día 5 de enero. En México los Estados que tienen más contagios activos son: Baja California Sur, Ciudad de México, Tabasco, Colima, San Luis Potosí, Nayarit, Zacatecas, Coahuila, Querétaro y Yucatán.
Está requetemal que no entendamos que debemos de cuidarnos adecuadamente, pero en el transporte público ya se relajaron las medidas de seguridad, los autobuses están retornando a su hacinamiento habitual, las fiestas son cada vez más frecuentes, no se respeta la sana distancia, hay mal uso de los cubrebocas Y va de nuez, en el transporte público YA NO HAY gel antibacterial, ni quien lo aplique.
Dejemos de lado lo que hacen mal las autoridades, ya ven que hasta Renani está convaleciendo de su corona, pero no de las chelas, no sean mal pensados, sino del chiwogusano ese.
Metámosle ganas al cuidado, inclusive en nuestras casas, cuidemos nuestra persona y así también estaremos cuidando a nuestros seres amados. Si no queremos cuidarnos, bien. Pero ni nuestros seres amados ni nadie se merece que les llevemos el virus para poner en riesgo sus vidas. ¿No creen?
Total repudio a la agresión sufrida en su domicilio, por el periodista Jaime Vargas Chablé, que lo puso en riesgo no solo a él sino a su familia, a manos de una persona desconocida, hasta el momento. Doble repudio a esa brutal agresión si se comprueba que ésta tiene que ver con su calidad de informador, de comunicador, de periodista, vaya. Nada justifica que un ser humano sea agredido de esa manera, para esos existen leyes, para arreglar nuestras diferencias.
Lo bueno de este asunto es que a través de la historia se conocen casos de periodistas que no se dejan amilanar y siempre están en busca de la verdad, aunque esta incomode a los poderosos….
Y mejor me voy corriendo porque si no llego a tiempo con las tortillas, la Gordis me dejará sentir su poderoso brazo derecho, con el izquierdo no lo hace tan mal, no se crean, lo peor es que podría dejarme sin el almuerzo. ¡Uay!