Lo bueno… Lo malo…
Por Mariano Quintal Yam
Para los Estados Unidos de Norteamérica, no lo sé, pero para México y las y los mexicanos es malo, nocivo, dañino, perjudicial, peligroso, pernicioso, negativo, insano, proterviano, y hasta diabólico el que un mal vecino, el pato Donald, no, no es eso, sino que Donald Trump haya sido elegido presidente de esa poderosa nación, cuyo mandatario electo nos mira como a malos vecinos y todavía se da el lujo de afirmar que las y los mexicanos somos delincuentes, violadores, narcos etc.
Además de las malas, denigrantes palabras contra las y los mexicanos se da el lujo de amenazar, sin recato alguno con imponerle a las mercancías de nuestro país, aranceles del 25% si no se detiene el flujo migratorio a ese pueblo, 50% si la medida no da buenos resultados, 75% más y así creo que su mente enferma de dinero y poder lo hará seguir hasta la luna en las amenazas contra nuestro país y desde luego nuestra recientemente Presidenta de México.
Claudia Sheinbaum Pardo se ha conducido con prudencia, como corresponde y ha informado a sus gobernados y gobernadas, que se comunicó telefónicamente con el criminal de Donald Trump, como lo han calificado numerosos periodistas y gente del espectáculo.
Según se indica en su “ridiculum vitae” o podríamos decir en su recuento de tropelías, un jurado lo declaró culpable de falsificar registros comerciales relacionados con un pago a Stormy Daniels, estrella porno. El resto es historia muuyyy conocida. Y todavía hay más, ¿o utilizará su enorme poder para silenciar a jueces venales?
¿En dónde he oído eso?
Así que don Pato, otra vez, con pato, no, no es ese animal, se trata de don Donald, que sabe muy bien lo que dice cuando habla de criminales.
El recuento de los daños en torno a estas elecciones en el vecino país del norte, que dio al traste con las aspiraciones de Kamala Harris por 301 votos electorales contra 226, de la aspirante demócrata, que al parecer las y los electores estadounidenses le cobraron cara la factura, por el color de su piel y por ser mujer.
Y desde luego que no podemos generalizar, porque en ese país hay personas bien intencionadas, pero por este momento no fueron suficientes para llevar a una mujer al trono presidencial, decimos trono, porque eso parece que considera don pato, que diga don Donald que es su nuevo juguete.
Y a otra cosa mariposa, ya veremos cómo sigue el comportamiento universal, del vecino del norte, que parece que mira a México, como el backyard o patio trasero que puede ser llenado con miasmas generadas por su corazón. ¿Tendrá?
Y mientras tanto nos comentan que en esos lares, están librándose verdaderas batallas internas para quedar dentro del gabinete presidencial de Trump, algo muy similar con lo que todavía sigue sucediendo en este lado del mundo, en donde los grillos, priístas, panistas, y del color que usted quiera asoman la cabeza para ver si don nuevo Gobernador de Yucatán los unge con el dedo para pasar a formar parte de su gabinete de trabajo.
La columneja ha comentado hasta la saciedad que no importan los colores, siempre y cuando las o los aspirantes a perjudicar, que diga, a ayudar a Yucatán, estén dispuestos a servir al prójimo y no a servirse de él, sobre todo cuando lo que buscan es llenarse de miasmas los bolsillos, con dinero mal habido, claro, con lo que evidencian su falta de integridad y por encima de todas las cosas su desconocimiento total de la palabra o valor si usted quiere, de la honestidad.
Ni duda cabe, una cucaracha acaba de hacer de las suyas en el patio vecino, hay que impedir que salte la cerca, de 3 mil kilómetros o más para acabar con los maltrechos derechos humanos, que, por este lado de la cerca, hacemos lo nuestro para que brille profundamente el respeto entre los seres pensantes, pero esto no significa sometimiento. ¿O sí?
Hay que estar pendientes, muy vigilantes para no dejar que nuestras prerrogativas fundamentales sean allanadas por entes del mal con atuendo güero o de cualquier otro color.
¿Masinó?
¿Usted qué piensa?