Por Mariano Quintal Yam

Lo bueno… Lo malo…
Bueno es que el Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación haya decidido que las elecciones municipales de Uayma se celebren de nueva cuenta, ante las irregularidades que se cometieron en esos comicios, en las pasadas elecciones.

Mario Mex Albornoz, dirigente de Morena en Yucatán denunció y condenó poco después de las elecciones de junio pasado lo que su partido consideró una elección de Estado, al igual que en las elecciones de Maxcanú y Progreso. En estos municipios, hasta el cierre de esta nota, esperan que también les sean favorables y se realicen nuevos comicios.

Malo sería que las irregularidades puedan cometerse de nueva cuenta, pues de acuerdo a Mex Albornoz, según publica Mis-Noticias: El actual gobierno de Yucatán, panista, superó con creces lo que antes había hecho el PRI en cuanto a compra y coacción del voto, uso indebido de programas sociales estatales e intervención ilegal de autoridades en el proceso electoral.
Malo, malísimo es el dicho aquel de que donde las dan las toman, porque lamentablemente se perdió una vida a causa de la violencia intrafamiliar, es decir la violencia que hay en el hogar de personas que se supone unieron sus vidas para, como en los cuentos de hadas, vivir felices para siempre.
Una joven de 21 años, vecina de la colonia San Esteban, del municipio de Tzucacab un día sí y otro también, o casi, recibía golpes de su compañero de vida. No hay que olvidar que cuando alguien se siente agredido, como en el caso de los ratones, finalmente le hacen frente al gato, aunque terminen sucumbiendo.
La mujer, cansada de tanta agresión logró tomar un cuchillo y le dio certera estocada al hombre con el cual había unido su vida. Éste, al sentirse herido fue por ayuda con sus padres, ya que vivían en la misma casa, pero a los pocos pasos cayó muerto.
Si algo bueno hay en este triste caso es que la mujer podría recuperar su libertad, si la ley demuestra que se trata de un caso de defensa propia.
Lamentable, muy lamentable el hecho de que un joven de 23 años de edad haya perdido la vida a manos de ¡CUATRO POLICÍAS MUNICIPALES DE MÉRIDA.

Horroroso que además de haber recibido brutal golpiza que le causó serias lesiones que finalmente le ocasionaron la muerte el muchacho haya sido violado a manos de quienes están para proteger a la ciudadanía. La iglesia en manos de Lutero, me dirán por ahí. O los coyotes en el gallinero…
Lo bueno en este caso es que el gobierno del Estado ha dicho que no habrá impunidad para estos agentes policiales. Y ofreció apoyo para la madre del infortunado, quien vino desde Veracruz y me pregunto: ¿Si hay impunidad para los policías estatales que mantienen aterrorizada a la familia de un periodista, según ha denunciado éste y hemos comentado en este espacio? Execrable, de ser cierto este último hecho, al igual que el silencio de las autoridades acusadas.
Y mejor me voy temblando de miedo y con mucho cuidado, rogándole al destino que no me haga caer en manos de policías corruptos y violadores. ¿Los hay? ¡Uay!