Terminó la lucha electoral, ahora sigue el trabajo limpio, honesto en beneficio de la ciudadanía


Lo bueno…Lo malo

Sin sorpresas, bueno, una que otra por ahí, pero lo requetebueno es que en términos generales la votación en Yucatán fue copiosa y podríamos decir que ejemplar, salvo por las revueltas, protestas, que nunca faltan en algunos municipios, que dilucidarán las autoridades electorales, según lo que a derecho corresponda.


Malo, muy malo es que algunas personas, candidatos y candidatas entre ellas, sigan haciendo borlote y se inconformen por lo sucedido el pasado domingo 6, esto lo digo en el caso de quienes no acepten los resultados que tienen que ser avalados por las correspondientes autoridades.
Muy bueno es que quienes hayan sido víctimas de alguna irregularidad o piensen que fue vulnerado alguno de sus derechos, protesten con la ley en la mano, para dirimir esas diferencias. Nunca la violencia, la amenaza, consecuentemente la agresividad, la intolerancia se justifican cuando las irregularidades observadas, o cometidas, pueden resolverse de acuerdo a las leyes que nos hemos dado. Terminó la lucha electoral ¿Será?, ahora sigue el trabajo limpio, honesto en beneficio de los gobernados de las nuevas autoridades electas… Otra vez ¿Será?
Muy malo es el triunfalismo, en medio de la tremenda paliza electoral recibida por el Partido Revolucionario Institucional, cuyo dirigente local, por cierto, hizo circo maroma y teatro para ser aspirante a una diputación local pero el electorado le dijo nanay. ¿Será que ya no recuerdan todo el bien que les hizo a sus electores como diputado?
Don Francisco Torres Rivas creo que vio la elección en otro Estado y opina que en la de Yucatán “No podemos dejar de señalar, como todos han sido testigos, que el 6 de junio, Yucatán vivió una verdadera elección de estado”. Mis-Noticias, 9 de junio. También el dirigente partidista dice, palabras más, palabras menos que recuperaron 2 municipios y seguirán gobernando en 39 más, pero nada comenta de los 17 municipios que perdieron, porque si la memoria no me es muy ingrata entraron en la contienda electoral con dominio en 58 municipios y ahora, orgullosamente presumen los 41 que gobernarán a partir del primero de septiembre, pero nada, absolutamente nada respecto a los que perdieron. ¿Será que no se han dado cuenta de la pérdida?
Y muy bueno es que el PRI estatal decida llevar su lucha jurídica en los sitios en donde considera que hay resultados cuestionables –así lo dijo- porque todos aquellos que sientan vulnerados sus derechos tienen de su lado a la ley, no para darles la razón a rajatabla, sino para decidir de acuerdo a la legislación si es verdad o no lo que defienden.
Bueno es que reconozcamos que no hay refrán perdido, como aquel de: Cuando te toca, aunque te quites, y cuando no te toca, aunque te pongas, esto lo decimos por el caso de Liborio Vidal Aguilar, quien fue rechazado por el Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación, por no acreditar la autoadscripción indígena, es decir no es maya y la ley requiere a un candidato de esa característica, así que su suplente Sergio Chalé Cauich obtuvo una victoria aplastante en el Distrito I con 87 mil 383 votos en los 35 municipios que conforman esa demarcación política. Ni hablar, cuando te toca…
Malo es lo que le sucedió a un agente policial, que por cumplir con su trabajo se puso a perseguir a un automóvil Chevrolet Spark en calles de Juan Pablo II. ¿Y saben por qué la persecución? Porque el conductor circulaba con su vehículo fuera del nuevo horario que ha impuesto el Gobierno del Estado ante el incremento de los casos de contagio del chiwogusano ya que Yucatán ha retornado al color naranja, ¿no que azul?, no, no, eso es de las elecciones. El color naranja es el del semáforo sanitario. Bueno, el caso es que en las calles 28 por 11 de la mencionada colonia el vehículo de la Secretaría de Seguridad Pública y el Spark terminaron su abrupto viaje dentro de una tienda. ¿Será que iban por los chescos, o las chelas? No sean malpensados, me refiero a las rubias.
Peor es que no me vaya corriendo por ahí a darle apoyo a los cantineros y a otros comerciantes que también están encabritados, como el caballo blanco que salió un domingo… no, no eso es de José Alfredo Jiménez, pero sí están como el caballo blanco ante la nueva restricción impuesta a comercios y anexas, debido al incremento de los casos atribuibles al chiwogusano.
¡Caramba, pobres cantineros!
Pero más pobres de nosotros si no nos cuidamos del chiwogusano que ahora volvió a ser chiwogusanote.