Respeto y solidaridad para ser entes dignos


Vía y cruces de los derechos humanos

Toda persona, como miembro de la sociedad, tiene derecho a la seguridad social, y a obtener, mediante el esfuerzo nacional y la cooperación internacional, habida cuenta de la organización y los recursos de cada Estado, la satisfacción de los derechos económicos, sociales y culturales, indispensables a su dignidad y al libre desarrollo de su personalidad.

Artículo 22 de la Declaración Universal de los Derechos Humanos, que en pocas palabras abarca el universo de los derechos que tiene una persona que viva en sociedad, en un pueblo, una ciudad, un país,

Como reza el citado Artículo los pueblos del mundo deben de unirse para satisfacer las necesidades sociales de todas las personas, derecho a la educación, a la salud. No hay más limitación que los recursos de cada país, no solo económicos, sino en cuanto a su capacidad de organización y lo más importante, la buena disposición de las respectivas autoridades, que elevan a ley estos derechos humanos.

Debemos de entender que la progresividad de los derechos humanos ha hecho que se dividan en generaciones, que por el momento diré que son 3, aunque hay otras generaciones que se encuentran en estudio, dada la progresividad de los mismos derechos humanos.

La Primera Generación se refiere a los derechos civiles y políticos que se refieren a la defensa de la libertad de las personas humanas. Esos derechos fueron reconocidos en los años 1800 al 1900. Su función principal es limitar el ejercicio del poder, es decir, de quienes dirigen a la sociedad de cualquier país. Pretenden garantizar la participación política de las y los ciudadanos. Son extensos los derechos civiles, pero citaremos algunos como la seguridad, la propiedad, la libertad, la vida… En los derechos políticos se funda la democracia, pues dan derecho al voto, la huelga, la libertad de asociación…

La Segunda Generación Se refiere a los derechos económicos, Sociales y Culturales, a los que se refiere el Artículo que comentamos y fueron reconocidos en 1900 al 2000 y defienden el derecho a la igualdad entre las y los individuos. Con estos derechos se pretende lograr condiciones de vida dignas para la humanidad. Estos derechos obligan al Estado a un hacer algo para protegerlos, como a la educación, al trabajo, a la salud, a la vivienda digna

La Tercera Generación de los Derechos Humanos se refiere a la justicia, la paz y la solidaridad y pretenden precisamente la defensa de la solidaridad. reconocidos actualmente. Esta Generación de derechos humanos promueve las relaciones pacíficas y constructivas, no solo entre los individuos, sino también entre los pueblos del mundo. Estos derechos son, entre otros, a la paz, al desarrollo, al ambiente sano…

Los derechos económicos, sociales y culturales fueron incorporados poco a poco en la legislación de los pueblos del mundo hacia finales del siglo XIX y durante el siglo XX. Tratan de fomentar la igualdad entre las personas, ofreciendo a todas las mismas oportunidades para que puedan desarrollar una vida digna. Su función consiste en promover la acción del Estado para garantizar el acceso de todos a unas condiciones de vida adecuadas.

En pocas palabras, hay que señalar que estos derechos humanos ya están reconocidos en todas las constituciones de los pueblos del mundo y es a los beneficiarios, es decir a ciudadanas y ciudadanos, a quienes compete, a quienes les corresponde trabajar, para hacer realidad esa filosofía de vida.

Todas las personas deben de defender esas prerrogativas, aprovechando las leyes que como pueblo nos hemos dado y eso podemos resumirlo en una sola palabra: RESPETO, porque si tú respetas a la persona que tienes enfrente puedes exigir el mismo respeto.

Solo con solidaridad y empatía lograremos dar y recibir ese respeto tan preciado para con nuestra dignidad como seres humanos.

Si lo logramos ya no habrá más cruces en la vía de los derechos humanos.