El T’alkú de la Tía Juana: El Hoyo Negro de la Tía


Por Rafael Mis Cobá

Desesperada por reunirse con su cabezón sobrino para contarle sus múltiples preocupaciones, particularmente porque ni Mau ni Reni la llevaron a Europa, la hermosa y “t’int’inkí” Tía Juana abordó su colectivo en la plaza de su natal Chikindzonot para trasladarse hasta a Pacabtún y concretar su encuentro con su travieso pariente.

Elegante y aromática, como siempre, y portando su multicolor terno de “xocbichuy”, la mesticita envidia de Belinda, Angelina Jolie y otras flacuchas famosas, subió al apretujado vehículo para viajar casi dos horas soportando el intenso calor, ronquidos y olores del sudoroso “xic’” de un “p’uroxón” panza caguamera que se encontraba a su lado.

Por fin, la escultural Eva del Mayab llegó al paradero de la capital yucateca y con paso cadencioso se dirigió al punto de encuentro pactado con su consentido sobrinín, aunque para ello tuvo que atravesar el sector de los mercados Lucas de Gálvez y San Benito soportando el acoso y de ciertos fulanos que se encontraban en esa populosa zona.

–¡Tía Juana!, exclamó el sujeto cabezón al divisar a su linda y curvilínea pariente, y, como siempre, se abalanzó sobre ella para darle un sonoro beso en su tersa mejilla.

–Tranquilo “mejenkizín”, que te puedo dar una cachetada estilo Will Smith.

–Tiita, ni se te ocurra porque puedes incurrir en violencia familiar y podrías terminar en los tribunales.

 –“Uay”, sobrino, como Amber Heard y Johnny Depp?

–Exacto, tía, así que olvídate de los “uasc’opes” que solías propinarme.

–Ni lo sueñes, “mejenkizín”.

–Para sueños, tía, los de Renán Barrera.

–¿Sigue pensando en ser gobernador?

–Bueno, esa es su obsesión, tía, sus sueños actuales es ser un alcalde viajero.

–¿Como Mau?

–No me lo recuerdes, sobrino, que esta vez Mau me dio tremendo cortón y no me invitó al paseo por Europa.

–Tía, no fue paseo, fue en busca de inversiones y más empleos para Yucatán.

–Mmmm, hazlo “loch”.

–Tía, no seas envidiosa, además, ahora tienes todavía chance de acompañar a Reni en su nuevo paseo que emprenderá a Nueva Orleáns y California, durante 8 días.

–“Uay”, sobrino, si apenas está regresando Reni de Suecia y ya se vuelve a ausentar?

–Tía, es que en Europa ni lo pelaron y no le quedó más remedio que visitar al embajador de México en Dinamarca, para presumir su “chan” única foto.

–“Chuch”, pobrecito, se quedó con las ganas de visitar Suecia, Alemania, Francia y España.

–Y lo peor, tía, perdió la oportunidad de estar cerca y apapachar a las suecas, teutonas, francesas y españolas.

–Sobrino, Reni no se quedó con las manos vacías y cruzó la frontera para estar en Bélgica y saciar sus deseos.

–“Uay”, entonces fue en busca de una belga?

–Bueno, Bruselas le quedaba cerca…, pero, además, “mejenkizín”, qué te importa si a Reni le gustan las belgas o las teutonas, respeta sus preferencias.

–Tranquila tía, no te enojes que te puede dar tu patatús.

–Patatús le pasó a dar a tu tío Chupi por el anuncio que hicieron los científicos sobre el descubrimiento de un enorme hoyo negro en el centro de la Vía Láctea.

-Pues dile al tío Chupirul que se tranquilice porque yo fui el primero en descubrir un hoyo negro y en un lugar más cercano del que se imaginan todos.

–¿Sobrino, y es peligroso ese hueco oscuro?

–Es excitante, tía.

–¡Cuidadito que empieces con tus majaderías, que te caigo a “uasc’opazos”, “mejenkizín”.

–Tiita, acuérdate que si me “uasc’opeas” incurres en violencia familiar y te pueden requerir en la Fiscalía.

–¡Pues deja de decir porquerías!

–Tiita, el hoyo negro no es una porquería, tú tienes uno muy bonito y a veces por el sudor hasta queda “jojolkí”.

La tía Juana no pudo soportar más sandeces del insolente tipo y más rápida que el ruso Bivol que tundió al Canelo Álvarez, la digna y hermosa mujer maya le asestó una docena de “uasc’opes” sin darle tiempo a meter las manos.

–El “tuch”, tiita, el “tuch”, a ese hoyo negro me refería, fue lo único que alcanzó a decir el irreverente sobrino mientras se sobaba los chuchulucos que le brotaban de su redonda cabeza de “lec”.