¡Cuidado con la verde!


Lo bueno… Lo malo…

Qué triste, o qué malo es que se cumplan algunas “profecías” que hacen los periodistas y hasta hayan, autoridades, o grillos o políticos, como usted quiera llamarles, que dicen que los periodistas “fifís” (lo correcto es fifíes) –desde luego esos acrídidos no tienen la obligación de saber Gramática, pero cuando menos sí saber que la política es el servicio público, entre otras cuestiones- solo saben agredir a quienes no dicen lo que los “servidores” quieren escuchar, etc, etc.

Y todo esto lo comento a propósito del choque ocurrido este viernes 3 en la calle 22 con Avenida Colón, Parque de las Américas entre un Nissan Versa que iba de poniente a oriente, pero al llegar al mencionado crucero el semáforo que da paso a los peatones, cambió a verde, es decir para dar paso a los viandantes. El conductor se confundió, pensó que tenía paso y colisionó a un Ford Fiesta, que tenía luz verde en el semáforo.

Por fortuna ningún peatón hacía uso de su derecho de paso, que si no. ¡Válgame!

El 26 de febrero, en esta misma columna publicamos el grave riesgo para peatones y lo hemos corroborado ahora, para los automovilistas.

A los pocos días de ese artículo, por la radio transmitieron unos avisos indicando que el peatón siempre tiene la preferencia. Asimismo, publiqué la opinión de un ex perito de tránsito en relación con la obligación de los automovilistas de ceder el paso al viandante y que si eso está en el Reglamento de Tránsito y que eso lo saben desde el momento de hacer su examen para que les den su licencia de conductor y que si patatín, patatán.

De nuevo la pregunta obligada es qué sucederá cuando un cristiano o cristiana pensando que tienen la seguridad de que el semáforo les da paso, sean atropellados o atropelladas por un automóvil o camión que también tiene derecho de paso, merced a la LUZ VERDE que dice que “pase usted”, pero habría que agregarle, bajo su propio riesgo, de acuerdo a las autoridades que están para velar por el bien ciudadano.

¿Será?

En medios de comunicación se han publicado algunos incidentes de este tipo en el que conductores de vehículos confunden el verde del semáforo para peatones con el verde que les da paso a las y los automovilistas, como un accidente ocurrido el 26 de abril siempre en la Avenida Colón, pero en el cruce con la calle 14. Los “protagonistas” fueron un Honda City y Nissan Versa. Los daños materiales fueron considerables, aunque sin lesionados.

Y son ya varios los percances que se han dado en este tenor, bueno sería que las autoridades policiales que conservan el registro de estos incidentes, como el 31 de marzo en la Avenida Remigio Aguilar con Circuito Colonias y el 25 de febrero en la Colonia Maya, y sabrá Vaaarrrggggaaaass, cuántos más, se apresuren para evitar mayores daños y confusión entre ciudadanía y conductores.

Ojalá que las autoridades policiales dejen de hacer como que no oigo, no oigo, soy de palo, no eso es un dicho popular o juego de niños.

Señores, hay que cumplir con el trabajo por el cual les paga el Estado para cuidar a la población. Lo menos que deben de hacer es evitar la luz verde para peatones y para automovilistas, como derecho de paso, cada uno debe de tener su propia luz de siga, naranja, amarillo, azul o tricolor o como les dé la gana, pero diferentes, para evitar las confusiones, que por el momento no han ocasionado pérdida de vidas, pero sí materiales, físicas y los consiguientes perjuicios, pérdida de tiempo etc, etc.

Y ahora mientras camino por la ciudad, no puedo irme corriendo a reunirme con la Gordis porque tengo que voltear a ver a diestra y siniestra, porque luz verde para peatón + luz verde para automovilista. ¡Uay! Prefiero que me deje mi ojo morado la Gordis, por llegar tarde a verla, que a que me mande al panteón o de perdis al hospital, un automovilista que además de despistado, con eso de las luces verdes, no estamos hablando de billetes, ¿o sí?, es de los que NO acostumbran a cederle el paso a la infantería.