Pidamos iluminación divina para los levanta dedos en el Congreso


Lo bueno… Lo malo…

En comentario anterior expuse los problemas económicos que podría tener el país por las reformas que envío el Ejecutivo nacional al Congreso de la Unión.

Bueno es que uno de mis dos lectores me haya preguntado si esta columneja está en desacuerdo con lo propuesto.

Mi respuesta es que de ninguna manera hay desacuerdo, sino únicamente un análisis con las posibles afectaciones que esas reformas podrían tener.

En la historia política, llamémosle contemporánea, los mandatarios en turno han realizado cambios a nuestra legislación, algunos han costado vidas, no olvidemos las Leyes de Reforma promulgadas por don Benito Pablo Juárez García, Benemérito de las Américas, según el Congreso de la República Dominicana.

Esas Leyes de Reforma dieron todo un giro político a la vida administrativa de México.

Con el paso del tiempo la Historia se ha encargado de hacernos ver que esas leyes eran las que el país requería en esos turbulentos tiempos en los que el clero dominaba la vida de nuestra nación…

Es bueno que se hagan reformas a nuestras leyes, pero también es necesario que esos cambios sean más benéficos que perjudiciales.

Por de pronto, hemos de confiar en nuestros legisladores, que a ellos finalmente compete la aprobación o no de las mencionadas reformas.

Si es posible, bueno sería que pidamos iluminación divina para que quienes han de levantar el sempiterno dedo, legislativamente hablando, demuestren que tienen suficiente materia gris para que sus decisiones en los cambios a nuestra legislación sean benéficas, tanto para los gobernados, como para el Estado mismo.

Pésimo sería que en los vericuetos de la jornada electoral que se avecina, se aprueben reformas que podrían hacerle algún daño a México, ya no digamos a los mexicanos, a quienes se intenta proteger.

Amén.

Parece que la sangre ha llegado al mediático río, en donde el poder político, el hermano del preciso, ha demandado a un informador, por la nada despreciable suma de 200 millones de pesos, más otros 400, lee toqu a quien le toque, por el asuntito, o asuntote de que Carlos Loret de Mola Álvarez lo exhibió en sus informaciones, vídeos incluidos, para indicar que habría recibido dinero en sobres amarillos, mismos que serían destinados a la campaña política del ahora mandatario mexicano. La historia es suficientemente sabida…

Este 27 de febrero los dos “contendientes” se vieron cara a cara en el Poder Judicial de la Ciudad de México, por toda una jornada de trabajo, 8 horas, en las que cada uno dio su versión de lo acontecido. Pese a que se les prohibió hablar del asunto, por aquello de la secrecía.

Pío López Obrador salió, al parecer muy contento de ese acto, porque afirmó, al decir Pío, es su nombre, que no me estoy burlando, que conste.

Aseguró Pío, otra vez el nombre, que durante el careo se demostró su inocencia, de lo que lo acusa el periodista ¿?

Por su parte Loret de Mola afirmó que Pío López Obrador “intentó hacer su mañanera, durante ocho horas en las que no pudo desacreditar ni desmentir nada. Terminó aceptando que los vídeos en los que recibe dinero en sobres amarillos son verdaderos y que sí recibió el dinero”.

También dijo el periodista que: “No me van a doblar, por más presiones que quieran ejercer, vamos a seguir ejerciendo la libertad de expresión al costo que sea”. “Sabemos que estamos enfrentando un sistema, sabemos todas las presiones que hay sobre el Poder Judicial, lo hemos visto desde hoy,, no sé si han visto a Pío López Obrador y entrevistarlo –al dirigirse a periodistas. Aparentemente ya empezaron los privilegios y a él le dieron un acceso donde no tenía que pasar por esto”. Se refería a una entrada privilegiada, para no enfrentar a la prensa.

La columneja opina que es un enfrentamiento del Poder, desde arriba hacia abajo, hasta un informador, un periodista que ha dicho su verdad, de frente, con valentía y aportando pruebas, según se ha dicho.

¿La maquinaria del poder aplastará lo que significa la libertad de expresión, ésta sin abusos ni maquinaciones?

Veremos…