Un niño bien alimentado es un niño feliz


Mérida. Yucatán a 4 de marzo de 2022.- Ante el regreso a clases presenciales y en el marco del Día Mundial de la Obesidad, el ISSSTE recomienda que pongamos cuidado en el desayuno de los pequeñitos.

La nutrióloga Betina Lara Ceballos, de la Clínica-Hospital de Aplicación Público Privada del Issste de Susulá, explicó que un niño en la escuela no puede rendir lo necesario si no hay un buen sustento alimenticio, razón por la cual no se recomienda esperar hasta el recreo para que los pequeñitos se alimenten.

Dijo que en esta institución se controla la obesidad los 365 días del año y es trabajo de todo un equipo multidisciplinario que inicia desde las autoridades hasta el servicio especializado en materia de nutrición.

Remarcó que el desayuno es la comida más importante del día por el aporte de energía que genera, por eso es necesario poner especial cuidado en su preparación y que los pequeñitos no se vayan a la escuela sin nada en el estómago, aunque lleven su gastada.

“El tiempo no es una disculpa para no darles de desayunar algo que los nutra, que los alimente, porque un desayuno completo puede ser tan sencillo como un licuado de leche y plátano con dos cucharas de miel de abeja y una cantidad pequeña de avena. Este es un desayuno básico y rico que no le caerá pesado a ningún niño y le permitirá disfrutarse al máximo”, acotó.

La nutrióloga dijo que no es recomendable darles dinero a los niños para las gastadas, porque no es bueno que inicien su día consumiendo fritangas y refrescos embotellados hasta la hora del recreo.

Recomendó que este regreso a las aulas representa una oportunidad que se adopte la cultura del refrigerio que consiste en un bocadito sano hecho en casa. Algo que se tenga listo en el refrigerador desde una noche antes, pueden ser galletas de avena, cualquier fruta, una porción de yogurt, un emparedado de jamón y queso panela, de atún, de pollo, elaborado con pan integral y mostaza, tratar de eliminar lo más posible la mayonesa para evitar a toda costa la obesidad.

Destacó que los humanos somos lo que comemos y hay que irse por lo natural lo más posible y evitar los alimentos que son altos en sustancias químicas y conservadores.

La nutrióloga criticó las comidas rápidas como las hamburguesas, pizzas, las tortas, los tacos los cuales pueden ser alimentos de fin de semana, pero no son recomendables para su consumo diario, es mucho más sano incluir todos los días en la dieta frutas y verduras desde las primeras etapas de la alimentación de los niños. “Hay que enseñarles a comer rico y sano desde pequeños esto será un hábito que les hará disfrutar de una vida plena, ellos mismos sabrán cómo cuidarse y evitaran consumir grasas saturadas”.

Añadió que también es importante tener cuidado con las porciones, no deben ser ni grandes, ni chicas sino justas, un plato de cereal con leche, dos huevos con un poco de jamón o salchicha.

“Es momento de retomar el uso de moldecitos y tenedores para ir a clase por el bien de los niños. Se recomienda que los niños hagan en total 5 comidas sanas al día para que no tengan hambre el desayuno, el refrigerio, la comida, a media tarde y la cena. Por ejemplo: Desayuno: Un licuado de fresas con leche y avena, Refrigerio: Pepino con chile y limón, una porción pequeña de pechuga empanizada, arroz y ensalada verde (lechuga, tomate y jugo de limón) pueden agregar una gelatina de cualquier sabor del tamaño de un vaso desechable, a media tarde unas galletas de avena y un vaso de jugo de sabor uva y finalmente en la cena una salchicha con pan”.

De igual manera dijo que los niños deben llevar siempre con ellos un botellón de agua de un litro para hidratarse con motivo de las altas temperaturas.

En el ISSSTE –finalizó–, las nuevas generaciones del personal de salud involucrado con esta acción están informadas y capacitadas para cuidar la alimentación no solo de los niños, sino de la población derechohabiente del Instituto en general.