Encuentran indicios de vida en Venus


Mérida, Yucatán, 27 de septiembre de 2020 (Agencias/Redacción Mis-Noticias).- De acuerdo a información difundida por varias agencias sobre un estudio publicado en Nature Astronomy, un equipo de investigadores ha descubierto gas fosfano en la atmósfera de Venus, lo que indica que ese planeta tiene potencial para albergar o haber albergado vida.

El descubrimiento del gas fosfano en la atmósfera de Venus indica que ese planeta tiene el “potencial” de albergar o haber albergado vida, según el estudio dado a conocer esta semana.

El equipo de la Universidad de Cardiff, que está a cargo de la investigación, señaló que el descubrimiento “sugiere que Venus podría acoger procesos fotoquímicos o geoquímicos”, aunque no implica necesariamente “una evidencia robusta de vida microbiana” en el planeta.

Las observaciones del telescopio James Clerk Maxwell y del Gran telescopio Milímetro/Submilímetro en el desierto de Atacama (Chile) en 2017 y 2019 han permitido a los científicos este hallazgo, que abre una senda en la posibilidad de encontrar vida fuera del planeta Tierra.

“Lo que creemos que hemos encontrado es gas fosfano en la atmósfera de Venus. En un planeta rocoso como la tierra, el fosfano es un gas raro y surge principalmente como resultado de la vida, así que es lo que llamamos un biomarcador”, explicó a la prensa Emily Drabek-Maunder, astrónoma en el Real Observatorio de Greenwich, parte del equipo que desarrolló el trabajo.

Los científicos señalaron que el fosfano (PH3) en la Tierra está causado por la actividad humana, como la industria, o por microorganismos, lo que puede ser un indicio de alguna forma de vida en Venus.

Las condiciones en la superficie de Venus son “hostiles a la vida”, de acuerdo con el estudio, pero el ambiente en sus nubes más altas, entre 53 y 62 kilómetros de altitud, es templado.

“Sin embargo, la composición de esas nubes es muy ácida, y en esas condiciones el fosfano se destruiría muy rápidamente”, apuntó el equipo investigador.

La misión encabezada por la profesora Jane Greaves analizó el eventual origen del fosfano en la atmósfera de Venus, analizando posibles fuentes en la superficie del planeta, micrometeoritos, relámpagos o procesos químicos que tienen lugar en las nubes, aunque fueron incapaz de determinarlo.

“Se necesitan más observaciones y modelos para explorar el origen del fosfano en la atmósfera de Venus”, admitieron.

En la presentación a la prensa del hallazgo, el profesor William Bains explicó que “estamos siendo muy cautos, no estamos diciendo que haya vida (en Venus). Lo que estamos diciendo es que hay algo que es realmente desconocido y que podría tratarse de vida”.

La comunidad científica ha acogido entre la euforia y el escepticismo el anuncio, que, pese a todo, se enfrenta a “sustanciales problemas conceptuales respecto a la idea de vida en Venus”, como reconocen los propios autores del estudio.

“A lo largo de toda mi carrera he estado interesada en la busca de vida en el universo, así que estoy entusiasmada con que esto sea siquiera posible. Pero animamos a otros a que nos digan en qué podemos habernos equivocado. Nuestro estudio y los datos son de acceso abierto: así funciona la ciencia”, resumió Greaves en declaraciones a la BBC