“Te voy a acusar con tu mamá”


Lo socorrido, ante el enojo porque alguien hizo algo que no gustaba, era decir: “Te voy a acusar con tu mamá”. Asocié este recuerdo a la expresión presidencial, reacción a la decisión de un. Juez federal de otorgar la suspensión provisional a la Ley de la Industria Eléctrica, en un amparo promovido por unas empresas de energía renovable:

– “Vamos a acudir a la Suprema Corte y queremos que la Judicatura del Poder Judicial haga una revisión del proceder de estos jueces, porque sería el colmo que el Poder Judicial del país estuviese al servicio de particulares”.

Y el presidente de la República se siguió de largo: “Estos jueces se crearon, surgen cuando se lleva a cabo la reforma energética para proteger a las empresas particulares y extranjeras, no para proteger y defender el interés nacional”.

El juez federal ordenó, entre otras cosas, lo siguiente:

– “La suspensión provisional que se concede es para el efecto de que se suspendan todas las consecuencias derivadas del Decreto por el que se reforman y adicionan diversas disposiciones de la Ley de la Industria Eléctrica, publicado en el Diario Oficial de la Federación el nueve de marzo de dos mil veintiuno”.

– “En este punto debe precisarse que los efectos de esta medida cautelar, a pesar de que se solicitó solamente por una empresa que participa en el mercado eléctrico mayorista, debe tener efectos generales, ya que de otorgar una medida cautelar con efectos particulares, es decir, solamente para la quejosa, este Juzgado de Distrito no solo estaría otorgándole una ventaja competitiva frente a los demás participantes de la industria eléctrica sino que, además, podría ocasionar distorsiones en dicho mercado, afectando la competencia y el desarrollo del sector, que es precisamente uno de los efectos adversos que esta medida cautelar busca evitar”.

Esta determinación no gustó a la presidencia de la República, y resolvió pedir al Consejo de la Judicatura Federal, se investigue al juzgador.

Una “mañanera” más.

El “mundo jurídico” y el “legislativo” debatió, enseguida, el “amago” presidencial.

Los juzgadores federales, primeros interesados, señalaron: “El único compromiso de la Asociación Nacional de Magistrados de Circuito y Jueces de Distrito del PJF es con la Constitución y la independencia para garantizar un efectivo Estado de Derecho”.

Otras opiniones autorizadas fueron del ministro en retiro, José Ramón Cossío, y del académicos Miguel Carbonell (Milenio, 13 marzo 2021):

El primero “publicó en redes sociales que son “lamentables” los comentarios del gobierno por la suspensión del juez a las reformas eléctricas, “tanto por el franco desconocimiento del derecho, como por la manera de tratar el tema fuera del único lugar en donde deben hacerlo: el recurso”.

El segundo: “Un estadista es el que gobierna con base en el conocimiento científico y con apoyo de especialistas, no quien todo lo confía a incondicionales que le hacen reverencias y le dan la razón incluso cuando no la tiene”.

El presidente de la República “fue calificado como dictador por varios legisladores, quienes lo compararon con Antonio López de Santa Ana y lo acusaron de violentar la autonomía del Poder Judicial”. La senadora Xóchitl Gálvez exclamó: ”Me parece gravísimo y estamos a un paso del autoritarismo. El juicio de amparo existe y protege a los ciudadanos del abuso de poder de las autoridades”. Otro senador, Emilio Álvarez Icaza “comparó a López Obrador con Santa Ana”. Dijo: “Lo lleva a parecerse más a López de Santa Anna que a Benito Juárez. Es la típica actitud pandillera de atacar a quien no se alinea a su comportamiento. Yo no puedo aceptar un amago de esta naturaleza”.

En lugar de perorar en la “mañanera”, lo procedente es seguir el procedimiento previsto en la ley de la materia. Usar los recursos disponibles, y cuidar el proceso del juicio de amparo.

En principio, se trata de una suspensión provisional, la definitiva en su caso se resolverá el próximo jueves 18, según informes del juzgado que atiende el caso. Luego, al final, se dictará la sentencia correspondiente, que también puede ser recurrida por las partes.

Actuar de esta manera, y no de otra, es como se fortalece el Estado de Derecho, aspiración permanente de la sociedad mexicana.

Las opiniones, que dominan cualquier “mañanera”, son atendibles hasta cierto grado. Pero son solo eso: opiniones.

Lo que importa para la convivencia social, es el imperio de la ley.