Mérida, 19 de noviembre de 2022 (Redacción Mis-Noticias).– Los aficionados mexicanos se han caracterizado por portarse mal y romper reglas cuando asisten a eventos mundiales como han sido las Copas de Futbol.
De acuerdo a una publicación de Record, menciona que una de las aficiones que tendrá mayor presencia en el certamen de Qatar será la de los mexicanos (como suele suceder en cada mundial), pero para poco orgullo de nuestro país, uno de ellos ya rompió las reglas al traficar alcohol de manera ilegal.
La nota señala que en las últimas horas se ha viralizado en redes sociales un video donde se puede apreciar a un hombre de nacionalidad mexicana arribando al aeropuerto de Doha, en el que con una mano arrastra su maleta, mientras que, en la otra aparentemente sostiene una chamarra de la selección, pero debajo de esta, trae una botella con contenido etílico, aparentemente tequila, misma que logró filtrar debido a que en la nación anfitriona este tipo de bebidas está prohibida durante el Mundial.
Record hace un recuento del comportamiento de aficionados poco digno de imitar.
En el mundial de Francia 1998, un hombre llamado Rodrigo Rafael Ortega de origen mexicano caminaba en París en estado de ebriedad y con ganas de ir al baño y al no encontrar un sanitario cerca decidió usar el Arco del Triunfo para orinar y apagó la “llama eterna”, la cual nunca había sido apagada desde 1921.
Durante el mundial de Corea-Japón en 2002 un mexicano con varias copas encima subió al tren bala del país nipón y accionó el botón de emergencia del tren, mismo que nunca había sido accionado en toda su historia. El hombre fue detenido por unas horas y posteriormente fue liberado, previo pago de su respectiva multa económica.
En Alemania 2006, otro mexicano llamado Evaristo Madero movilizó al ejército al quedarse dormido en búnker que el gobierno había acondicionado para que 1000 personas pasaran la noche.
En Sudáfrica 2010 otro compatriota hizo de las suyas al vestir con indumentaria mexicana a una estatua de Nelson Mandela, lo que le valió ser detenido y encarcelado unas horas.
En Brasil 2014 sucedió el más trágico de los sucesos en los que ha participado un mexicano. El hijo del procurador de Chiapas Jorge Alberto López Amores, de 29 años de edad, decidió aventarse desde el piso 15 del crucero en que viajaba alardeando que él iba hacer historia al aventarse al mar. Murió ahogado al caer y su cuerpo nunca fue encontrado.