Mérida se convirtió en el punto de encuentro mundial de la gastronomía durante la Reunión Anual de la Red de Ciudades Creativas de la Gastronomía de la UNESCO, donde el Centro Cultural Olimpo recibió la mesa panel “Más allá del plato: la gastronomía como estrategia de ciudad”, coordinada por Carola Diez, directora de la Fundación Haciendas del Mundo Maya.

El diálogo reunió a representantes de más de 60 ciudades de los cinco continentes, quienes coincidieron en la importancia de equilibrar la cocina tradicional maya con propuestas contemporáneas sin perder la identidad que distingue a la capital yucateca en el escenario internacional.

Para Sergio Salas Yaro, director del Instituto Xreapolis de Arequipa (Perú), los ecosistemas gastronómicos son “orgánicos, vibrantes y vivos”, reflejo de la vitalidad de las ciudades. Señaló que esta es la primera conferencia anual de la red celebrada en Latinoamérica y reconoció el modelo de gobernanza de Mérida, capaz de integrar patrimonio alimentario e innovación. “Hoy, 64 ciudades observan a Mérida: su sostenibilidad, su cadena productiva, su identidad. Es una ciudad creativa exitosa que tiene mucho que compartir”, afirmó.
Salas Yaro agregó que el intercambio entre ciudades no solo se basa en recetas o técnicas, sino en modelos de cooperación, investigación y formación que fortalecen a las comunidades.
Uno de los momentos destacados del encuentro fue el reconocimiento a doña Eulogia Poot Hoil, cocinera tradicional de Tixcacalcupul, homenajeada por su trayectoria como guardiana del saber ancestral. “Nuestra vida está en la cocina, en lo que heredamos de nuestras abuelas”, expresó al recibir el aplauso de especialistas y colegas internacionales.
Desde el sur del estado, Mary Flor Can Canul comentó que estos espacios permiten visibilizar el trabajo que se realiza en las milpas y cocinas rurales. Subrayó la importancia de que las nuevas generaciones “vuelvan a la milpa” para comprender el origen de los alimentos y preservar el legado culinario yucateco.
El chef David Cetina, del restaurante La Tradición, enfatizó que la gastronomía también es una estrategia de ciudad que debe sostenerse en las cadenas productivas locales. Resaltó el proyecto Instituto Casas, que ofrecerá formación gratuita en 200 municipios del estado, y recordó que “los mercados son el corazón de una ciudad. Ahí está la identidad y la memoria”.
La jornada cerró con un mensaje compartido: la gastronomía es un patrimonio vivo. Desde las cocinas mayas hasta los foros internacionales, Mérida reafirmó que tradición e innovación pueden caminar juntas como parte de una misma historia, impulsadas por productores, chefs y comunidades que mantienen encendido el fuego del saber ancestral.













