Lo bueno… Lo malo…

Por Mariano Quintal Yam
Malo y triste a la vez, que la columneja de esta semana tenga que pergeñarse sobre un teclado resbaloso, mojado por las lágrimas de este aporreador de teclas.
Y no se piense que es una pose melodramática o melomadrática, como dirían algunos ironistas.
Pero mis dos lectores se merecen todo el respeto y mi agradecimiento por perder su valiosísimo tiempo escudriñando estas húmedas letras.
El pésimo estado de ánimo que me aflige es por la innecesaria muerte de una mujer trabajadora a manos del dizque crimen organizado. Escoria que no pudiendo destacar del lado del bien, deciden hacerlo desde las profundidades del mal, de las tinieblas y no les tiembla la mano para arrebatarle un caramelo a un chiquillo inocente que se cruzó por su camino. Lo mismo da para ellos, que ante la “complacencia” o incapacidad diría yo, de autoridades venales, que en su segunda acepción la Academia de la Lengua Española dice: vendible o expuesto a la venta y en sus sinónimos: venable, vendible, negociable, traspasable o sobornable, corruptible, inmoral, deshonesto, infiel…

Me alejo un poco del tema principal de este comentario, pero no olvidemos que el segundo hombre de a bordo en el sexenio anterior está seriamente acusado de negociar con el crimen organizado y recientemente, en un cateo en su residencia se conocieron huellas de El Mencho, Nemesio Oseguera Cervantes terrible capo, armas y drogas. El cateo, afirman expone evidencia irrefutable en contra de Adán Augusto López, porque esa casa en Villahermosa, Tabasco se dice que es propiedad de una empresa que estaría ligada al ex gobernador de Tabasco y ahora senador y líder de Morena.
De ser cierta esa versión, algo muy feo está por venir. Mientras tanto se está en espera de que las autoridades judiciales refrenden lo hecho y encontrado en ese lugar, más de tres toneladas de droga y arsenal que ya lo quisieran los esbirros del pato Donald, en Patolandia, claro, en su lucha contra humildes trabajadores…
Esas actitudes de las autoridades en México han envalentonado a los espíritus del mal para ensañarse contra la ciudadanía trabajadora de nuestro país y recientemente contra una mujer inquieta, con espíritu emprendedor.
Me niego a creer en las acusaciones en contra de autoridades constituidas…
Irma Hernández Cruz, maestra jubilada de 62 años de edad, quien además se desempeñaba como taxista en Álamo Temapache, Veracruz perdió la vida de manera por demás cruel. Fue secuestrada y obligada a pedir en un vídeo, en el que se le ve rodeada de engendros del mal, embozados, para ocultar su identidad, que paguen las cuotas que exigen estos maleantes.

De acuerdo con las investigaciones del caso el secuestro de la mujer lo perpetraron los delincuentes, sin temor alguno a eso de las 18:30 horas, en la calle de Sor Juana Inés de la Cruz, frente al mercado municipal, sin importarles lo concurrido del sitio.
Obviamente, la nutrida concurrencia en el momento del secuestro se guardó en busca de refugio, ante el riesgo que corrían sus vidas.
La maestra en retiro y trabajadora del volante fue obligada a decir en el vídeo, rodeada de al menos diez encapuchados fuertemente armados: “Mi nombre es Irma Hernández Cruz, manejo el taxi 554. Compañeros taxistas, con la mafia veracruzana no se juega. Paguen su cuota como debe ser con ellos, y dejen de andar de enculados con los charros, que sólo los extorsionan o van a terminar como yo”.
Después se diría que la mujer falleció de un infarto, ocasionado por la violencia a la cual fue sometida por sus secuestradores.
Y a toro pasado dicen las autoridades judiciales en Veracruz, que están investigando la disputa entre grupos criminales, por el control del cobro de piso en Álamo Temapache. ¿No me digan, de verdad?
Por lo dicho en el vídeo de marras, uno de esos grupos sería el de los charros y habría que ver quiénes se autodenominan “la mafia veracruzana”.
Para nadie es un secreto que el cobro de derecho de piso existe en gran parte de México, sino es que en todo él. Recuerden que hace ya algunos años en Quintana Roo fue incendiada una reconocida agencia de carros deportivos y que numerosos comerciantes han denunciado la amenaza de paga o pego y si no hay dinero para pagar al “deudor” le cuesta la vida el no tener dinero para mantener a entes del mal, espíritus protervianos que se aprovechan de la debilidad ajena o del contubernio de autoridades con el crimen organizado.
Se sabe que Yucatán no se libra de este intento de criminales de cobrar el derecho de piso.
La columneja cree firmemente que debemos de confiar en entes de razón y criterio firme, proclive a cumplir con su tarea de proteger a la sociedad, puesto que para eso fueron elegidos servidores o servidoras públicas o públicos y no para permitir que el cáncer del mal corroa lentamente a nuestra sociedad.
Totalmente injusto, de lesa injusticia, que las y los testaferros usen la fuerza en contra de ciudadanos que luchan por salir adelante basados en su fe y esperanza de construir un país mejor y más justo donde el imperio del bien sea una realidad y no campo de cultivo para el germen del mal. ¿Verdad senador Adán Augusto?
Y para disiparme con agua de mar, las lágrimas que no paro de verter, ¿ya habrán leído mis dos lectores que en Progreso, calle 40 con 71, se retiraron cuatro contenedores que impedían el libre paso a la playa en ese sitio que al parecer el propietario del predio tendría como playa privada, ¿pese a que hay derecho de libre paso? Y se requetedice que construyó una fosa séptica en plena vía pública?
Al parecer el sujeto que dicen tiene nexos con una televisora local, desde hace algún tiempo ha estado abusando de su poder mediático, apoyado por un presidente municipal corrupto. Sin lugar a dudas es información de peso.
¿La leeremos completa alguna vez?